Este es mi sentir personal y por alguna razón siento que debo expresarla, respetando las creencias y certezas de todos los que me lean:
EL amor, nos contiene a todos; a blancos a negros, a ricos y pobres, a cristianos y musulmanes, a escolarizados y no escolarizados, a los gobernantes y al pueblo, al sur y al norte, al ignorante y al inteligente, al tonto y al sabio, a la victima y al victimario, al abusador y al abusado.
Cuando nombro a JEHOVA, ya estoy polarizando una DIVINIDAD que lo contiene TODO Y A TODOS.
DIOS, es el innombrable, el desconocido...
...porque mi mente a pesar de ser perfecta y completa en si misma, necesita de los otros, del cuerpo, del corazón, del espíritu para comprender UNA TOTALIDAD que nos ABARCA A TODOS POR IGUAL Y EN LA MISMA MEDIDA.
Ya dejé de ser únicamente el centro y paso a comprender que también soy el otro...
...ese Hitler, ese Obama, ese pobre, ese ignorante... y a través de ellos yo integro ese reconocer y recordar EL AMOR E INTELIGENCIA DIVINA QUE HABITA EN TODO Y TODOS.
Yo escojo la forma, por medio del rechazo ó por medio de la integración y aceptación. En eso, radica nuestro libre albedrío, en verme ajeno A, o integrado A.
No olvidemos la historia del Titanic: perecemos todos o nos "salvamos" todos...
...¿Pero quién decide qué es salvamos o qué es perecer?.
A caso, la muerte no es también un nuevo nacimiento, como lo hizo Jesús.
Jesús, es una palabra que no acostumbro a usar porque aún el más santo no puede comprender y entender lo que realmente es ÉL, EN ESENCIA.
Nos falta cosas por integrar de esta ENERGÍA AMOROSA, COMPLETA, ETERNA, MAGNÁNIMA...que se traduce en una única palabra: AMOR.
Algunos dirán que solo se necesitaría un buen capitán que esté atento para pasar al otro lado.
La pregunta es, ¿ a quién se le da el titulo de capitán?, a un ser que esta fuera de mí y que además es superior a mi. O comprendo que somos una TOTALIDAD viviéndonos como entidades separadas, tratando de conocernos y comprendernos.
Y que sí, a alguien o algo busco, es ¡A MI MISMO! en los otros.
Sí existe una batalla que librar, esa es única y exclusivamente conmigo mismo.
Las guerras acabarían, si comprendiéramos que, cuando lucho contra el otro no es contra él que combato, sino, contra una ENERGÍA QUE HABITA EN MI, y a la cual decidí rechazar.
Utilizó al otro, pretendiendo que "al matarle", esa energía desaparecerá en mí.
Mato ideas, estructuras, "personas", conductas... La energía no muere ni nace, se TRANSFORMA ....
Así que, si alguien debe transformarse, ¡ESE SOY YO!.
ESTOY SEGURA QUE TODOS AQUÍ BUSCAMOS LO MISMO:
ENCONTRARNOS EN NUESTRO INTERIOR Y RECONOCER ALLÍ AL QUE ES INNOMBRABLE Y ETERNO.
Solo que escogimos caminos diferentes y percepciones diferentes.
Aún así, seguimos siendo hermanos, enojados o no, en desacuerdo o no.
Todos habitamos el mismo barco con o sin EGO identificado.
Por otro lado, me parece que en la medida que emano más AMOR, existe más posibilidades de hacer mi percepción más clara.
Otra pregunta:
¿Por qué creen que Juan Pablo II después de sufrir el atentado lo primero que hizo fué ir a buscar a su agresor y hacer las paces con él? :
1.¿Por política?,
2. ¿Por EGO?,
3. ¿Por SANTO?
....No,
... Por SER RESPONSABLE DE LA ENERGÍA QUE EMANABA Y HABITABA EN ÉL.
¿Por qué creen que personajes importantes en cuanto a ser conscientes se refiere, como Ghandi, Jaime Garzón, Galan, Facundo Cabral , fallecieron "victimas" de lo mismo? Una bala, un revolver, una organización.
¿Por qué es inevitable, querer matar algo afuera, que no me mate A MI MISMO?.
- Lo que es arriba es abajo, lo que es ADENTRO es AFUERA.
- lo que doy me lo doy lo que no doy me lo quito- Alejandro Jodoroswky-
- Es agregando que transformo, no sustrayendo.
